17 octubre, 2009

Si alguien ama a una flor de la que no existe más que un ejemplar entre los millones y millones de estrellas, es suficiente para ser feliz cuando mira las estrellas. Se dice 'mi flor está allí, en alguna parte'...

Habría que releer El Principito de grande también che.

11 mayo, 2009

El mundo, día de un año,
cuantos amantes se dan la mano

sin ver distancias

ni cercas, ni mares, ni largos años

frente a los prejuicios se ven hermosos

y dicen que al fin

nunca llegan tarde

para que un amor los haga dichosos

y así dan cuenta de un buen amor
de un sólo amor

07 febrero, 2009

Vaivén

Vení a dormir conmigo: no haremos el amor, él nos hará.
JULIO CORTÁZAR

Como casi siempre, al descubrirse, el desnudo y la desnuda se asombran de sus desnudeces. Como casi siempre, éstas son mejores que las de la memoria. Por supuesto, son jóvenes. Él es el primero en quebrar el encantamiento y la inercia. Sus manos se ahuecan para buscar y encontrar los pechos de ella, que al mero contacto lucen, se renuevan. Entonces, acariciando persuasivamente entre índice y pulgar los extremos radiantes, él dice o piensa: No es que carezca de sentido de culpa, pero la verdad es que no me atormento. Las sensaciones llegan y se van, son aves migratorias, y cuando vuelven, si vuelven, ya no son las mismas. Se fueron frescas, espontáneas, recién nacidas, y regresan maduras, inevitablemente programadas. Entonces, ¿a qué ahogarse en el deber? El deber, al igual que el dolor (¿o será otra filial del dolor?), es un cepo. Esto hay que saberlo de una vez para siempre, si queremos que su gesto amargo, rencoroso, no nos sorprenda o nos frustre.

Las colonizadoras manos de ella acarician la colonizada espalda de él, y empiezan a invadirlo, a abrazarlo, a tenerlo. Entonces ella dice o piensa: Todo eso lo sé. Y sin embargo, en mí hay una vocación de permanencia, que, por otra parte, nunca he visto cumplida. Es obvio que el futuro está lleno de amenazas, de riesgos, de inseguridades, pero yo creo (de creer en y de crear), para mi uso personal, un cielo despejado. De lo contrario, el goce se me gasta antes de tiempo. Vos te aferrás al instante, ése es tu estilo. Mi instante, en cambio, quiere ser prólogo de otro, aunque lo más probable es que luego ese otro instante no comparezca. Algo o alguien puede matar mi futuro, pero quiero que sepas que mi futuro no es suicida.

Ahora la boca del hombre se ha detenido en la oreja de ella y opta por pensar o decir: ¿Sabés una cosa? Tu oreja no siempre está desnuda. Sólo lo está cuando vos lo estás. Me gusta tu oreja desnuda, tal vez como una consecuencia de que me gustás así, como estás ahora. Después de todo, tenés razón: el instante es mi estilo. Es allí que lo juego todo. No ahorro disfrutes para vivir de esa renta en la tercera edad. Beso tu oreja como si nunca hubiera besado otra oreja. Por eso tu oído escucha estas palabras que nunca escuchó antes. Ni dije o pensé antes. El amor no es repetición. Cada acto de amor es un ciclo en sí mismo, una órbita cerrada en su propio ritual. Es, cómo podría explicarte, un puño de vida. El amor no es repetición.

La mujer mueve la cabeza hasta que sus labios rozan los de él y entonces dice o piensa: Ya lo ves, has repetido que no es repetición. Y eso quiere decir algo. Digamos que es y no es. Todo es verdad. A mí, por ejemplo, me gusta repetir el amor, aunque reconozo que cada fase tiene un final distinto, una bisagra original que la une con la fase que vendrá. La repetición está en el comienzo y es como un eco, un recordatorio de la piel. A mí siempre me enternece recordar tu piel, pero sobre todo que tu piel me recuerde tu piel. No tengas miedo, en el amor (al menos, en mi amor) la repetición no se vuelve rutina. El acto mecánico, físico, puede (o no) ser igual o semejante, pero tu cuerpo y mi cuerpo nunca son los mismos. El sexo que hoy vas a ofrecerme no es el mismo del sábado pasado ni será, estoy segura, el del próximo martes, y el surco mío que lo reciba tampoco es ni será el mismo. El amor es y no es repetición.

Él se aparta un poco para mejor unirse, o sea para que sus manos, y de a ratos sus labios, puedan ir recorriendo colinas y hondonadas, rincones y llanuras. La piel de ella alternativamente se eriza o se abandona, en tanto que allá arriba la boca se entreabre y los ojos comienzan a cerrarse. Entonces él piensa o dice: ¿Cómo voy a programar o a calcular el amor de mañana o pasado, si tengo aquí esta concreta recompensa (o castigo) que sos vos, hoy? No te engaño si en este momento te confieso que te quiero toda, cuerpo y alma y alrededores, pero ¿para qué voy a hacerle descuentos a este deleite pronosticando qué sentiré el martes o el jueves? Si aparto mi mirada de tu vientre húmedo y contemplo allá enfrente el muro blanco, o más allá, si trato de vislumbrar el tallado infinito, me encontraré inexorablemente con esa última viga que es la muerte, y ésta es, por definición, el no-amor. ¿Cómo no preferir mirarte a vos, que sos la vida o por lo menos una de sus más incitantes imitaciones?

Hay un silencio cálido, inexpugnable, que envuelve los dos cuerpos. De pronto, el hombre decide apoyar su oído sobre el poderoso ombligo de la mujer. Es como si a través del omphalos, esa cicatriz genérica, esa boca muda, la mujer murmurara o vibrara en el oído del hombre: Quisiera tenerte siempre, pero me resigno a tenerte hoy. Quizá la diferencia resida en que mientras tu goce es explosivo, fulgurante, el mío, que acaso es más profundo, tiene ojeras de melancolía. No puedo evitar prever desde ahora, junto al buen azar de tenerte, el anticipo de la nostalgia que sentiré cuando no estés. Ya lo sé. Demasiado lo sé. Todo está claro. Todo estuvo claro desde el vamos. Pero que me resigne no incluye que te mienta. Y esto que yo, ombligo, dejo en vos, oído, es para que alguna vez te zumbe y al menos te preguntes qué será ese zumbido.

Ni el desnudo, ni la desnuda oyen campanas. Eso pasaba antes, en las fábulas familiares de las abuelas o, más cándidamente, en alguna marchita película de Burguess Meredith. Éstos de ahora escuchan truenos lejanísimos, bocinas de ansiedad, ambulancias que aúllan, rock en ondas y, más confidencialmente, labios que se disfrutan, comunión de salivas. La mujer se estira en toda la extensión de su piel sabrosa, abre brazos y piernas, tal como si se desperezara pero más bien perezándose. Siente que la boca del hombre va ascendiendo a su boca y cuando por fin cada lengua se encuentra con su prójima, ambas pro-onen o resuelven o gimen: Qué importa si es o no repetición, qué importa si es prólogo o desenlace. Estamos. Somos. Una y uno. Dejemos que la muerte nos odie desde lejos. Desde muy lejos. Somos. Estamos. Tan cerca de vos que soy vos. Tan cerca de mí que sos yo. Una +uno = une. Se unen, pues. El mundo queda fuera, con sus culpas, sus deberes, sus ropas. El desnudo y la desnuda son únicos testigos del amor sin testigos. Uno sobre otra, o viceversa, la humedad de sus vientres es de ambos. Los cuerpos (esos futuros, inevitables proveedores de ceniza) borran de un placerazo sus condenas y también se reconocen y trabajan. Trabajan y se gozan, únicos en el mundo, por fortuna olvidados. Entonces ella piensa o grita: Vení, y él canta o piensa: Voy. Y así, poco a poco (y al final, mucho a mucho), se ensimisma y celebra, se alucina y consuma el va-i-vén.

05 diciembre, 2008

Algun dia aprenderé el porque de algunas cosas
empiezo a aprender como camina mi corazón
me precipito salto al vacio luego me siento y me pongo a buscarme

Y me busco, busco me busco y no me encuentro
Yo busco me busco y no me encuentro
busco me busco y no me encuentro
y yo busco me busco y no me encuentro
Y busco yo busco y me busco y no me encuentro
y busco me busco y no me encuentro
busco me busco y no me encuentro y busco y me busco...

Y no paro de buscarme más y doy vueltas y pienso sin parar
y me miro en el espejo despacito,
me analizo y me enfado otra vez conmigo
y me digo anda ya mujer
si esto tiene solución menos la muerte
Y me levanto muy segura
y me echo a llorar como una niña oscura

Ya no me divierto pienso algunos dias
y al otro dia no hay sol que me acueste
me echo a correr buscando no se que
pensando que tal vez es posible reponerse

Y yo mientras busco me busco y no me encuentro
yo busco me busco y no me encuentro
y busco me busco y no me encuentro
y yo busco me busco y me busco...

Y cuando mi cuerpo termine de llorar,
echaré una ramita al mar
que esa balsa pá un marinero naufrago
y pá que no vaya a tientas le pondré yo un faro

Y ahora que he caido al fondo de una piscina
que ni una gotita de agua tenia
voy a recoger mis alitas rotas
y las pegaré trocito a trozo y volaré
Yo soy una montaña rusa que sube que baja
que rie que calla confusa me dejo de llevar llevá
por lo que los dias me quieran mostrar

Y yo busco me busco y no me encuentro
y yo busco me busco y no me encuentro
y yo busco me busco y no me encuentro
y yo busco me busco y me busco...

Y ya no me divierto pienso algunos dias
y al otro dia no hay sol que me acueste
me echo a correr buscando no se que
pensando que tal vez es posible reponerse

Y yo mientras busco me busco y no me encuentro
y yo busco me busco y no me encuentro
Y yo busco me busco y me busco
y me busco y me busco
y me busco y no me encuentro
Y busco me busco y no me encuentro
y busco me busco y no me encuentro
Y yo busco yo busco me busco me busco y me busco...

09 marzo, 2008

Esta oscuridad,

esta noche de perros,

esta soledad

que pronto te va a matar.



Es muy tarde ya y estoy harta de llorar.









y ese ismael que me taladra la cabeza diciendome que nadie me va a llorar... quiero convencerme de lo contrario pero noches como hoy no puedo

04 diciembre, 2007

está bueno tener boca
está bueno porque te puedo escupir o te puedo besar
sonreir o putear

está bueno porque te puedo decir que te puedo decir que está bueno

está bueno haberse caido y haberse levantado

está bueno haber andado tanto
tropezado tanto
pero andando, todavía me levanto
y está bueno!

el tiempo es mio y me lo tomo
salu!
yo soy mi gobierno y me dispongo a tomarme el tiempo libre
salu!
voy a tomar la tierra, a tomarme el cielo y a dejarme tomar
salu!
y voy a tomar sol
salu!
voy a tomar tu mano y te podés aprovechar y podés tomarme el codo
salu!
pero si nos tomamos confianza, y nos tomamos, nos tomamos, nos tomamos....
nos podemos agarrar una curda de esperanza
salu!
y tomarnos vacaciones de esta joda para siempre
salu!

es maravilloso llegar a viejo y llegar diciendo no
viejo ¿queres pachanga?
no!
¿queres entrar en la jodita?
no!
viejo, te pago si te callás la boca
no!
es maravilloso llegar a viejo y llegar rabioso... pobre, asi, sin un mango

pobre de aquel que no fue rebelde a los veinte años... y pobre de aquel que se rindió a los treinta

estoy harta de sensualidad
odio el glamour
el mundo es light: encandila y enceguece
cada pueblo tiene el jet set que se merece
la tierra es de los que la trabajan, y las canciones son de los que las escuchan
no quiero ser una hembra diet
lo esencial es invisible a la tele

todos somos presos de algo: de la educación, de la religión, de la mala información
todos somos presos politicos

suerte que puedo optar
puedo correr, mentir, disimular
suerte que puedo tratar de corregir error por error
suerte que puedo matar
y elegi no matar.




30 noviembre, 2007

soy una isla
soy una isla y cada vez llega menos gente a mi orilla

soy mi propio naufrago
soy el náufrago y la corriente no me acompaña
no llego a mi costa
ni alcanzo mis playas
ni me golpean las olas

solamente me queda esa delgada línea de arena
esa que me conecta con el continente

que me hace menos isla
esa, que no me deja ser náufrago
la que acaricia mis playas
y lame mis orillas

soy una isla
soy una isla y a veces me gustaría que lleguen más